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La osadía a lo Mazón del alcalde malagueño Paco de la Torre (PP) ante la alerta roja poco antes de que las calles del centro de la ciudad comenzasen a quedar anegadas este miércoles

Dicen que el hombre es el único animal que tropieza dos o más veces con la misma piedra. Una cita real como la vida misma. Tan solo quince días después de que Carlos Mazón eludiese de un sinfín de formas negligentes diversas atender a las alarmantes previsiones que la AEMET había emitido para la provincia de Valencia desde días antes de que la DANA azotase con fuerza, dejando más de 200 fallecidos y fallecidas, Paco de la Torre, el alcalde de la ciudad de Málaga, quiso emular a su compañero de filas en el Partido Popular y líder -de momento- de la Generalitat Valenciana y, en la jornada de ayer miércoles, cuando la capital costasoleña se encontraba en aviso rojo por otra nueva DANA, negar cualquier tipo de “alarma” en la localidad malacitana en torno a este temporal.

Llegado el mediodía, justo cuando las precipitaciones comenzaban a ser más fuertes en la ciudad y poco antes de que las primeras calles, especialmente, las del centro histórico -Victoria, Carretería, Mármoles…- empezaban a quedar anegadas y a convertirse en auténticos torrentes de agua que acababan acumulándose en otras calles con menor pendiente y más anchas, De la Torre aseguró ante los micrófonos de los medios que “no veo motivos en la ciudad [Málaga] para este tipo de alarmas”.

El mensaje del primer edil malagueño fue preocupantemente similar al que profirió Carlos Mazón horas antes del inicio de la tragedia en municipios como Aldaia o Paiporta, en el que el máximo dirigente valenciano aseguraba esperarse que el temporal “disminuyera en torno a las 18:00 h” -ocurriendo, sin embargo, final y desgraciadamente todo lo contrario-.

El máximo responsable del Ayuntamiento costasoleño llegó a aseverar, de hecho, que la ciudad de Málaga “no tiene problema” con el río Guadalmedina pese a que, de la misma forma, apenas una hora más tarde, el caudal de este a su paso por la capital malagueña, como ya ocurriese también hace un par de semanas, volvía a relucir una estampa muy inquietante e inédita al estar rebosando de agua, atemorizando a los malagueños y malagueñas ante un posible desborde de sus aguas, lo que hubiera provocado un gran problema en la localidad.

Periodista. Magíster en Comunicación Institucional y Política. Pasé por EL PAÍS y Agencia EFE. Codirector de Espacio Andaluz (EA).

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