Nueve días del nuevo año escolar, tan solo, ha sido el período que le ha bastado a las familias de los menores del CEIP Juan de Mena, en Córdoba, para alertar del más que deficiente servicio de comedor que reciben los pequeños y pequeñas, una máxima que se viene repitiendo durante los últimos años en multitud de centros escolares de toda Andalucía.
Las madres y los padres de estos y estas han hecho llegar a Facua, una de las principales organizaciones de consumidores en España, una multitud de quejas en relación con la “baja calidad de los alimentos”, “insuficiencia de raciones”, “comida mal cocinada” y “trato inapropiado hacia los niños y niñas”.
Las familias de los menores, que ya han iniciado movilizaciones “en busca de soluciones”, han asegurado que formalizarán los documentos que han hecho llegar a Facua ante la Delegación de Educación, a tenor de que el propio máximo responsable provincial de la cartera educativa, José Francisco Viso, emplazó, en una entrevista con Cordópolis, a estas a que formularan las quejas por escrito ante la Junta de Andalucía y no en su círculo más cercano.
En el escrito, estas madres y padres lamentan que estos problemas y sus consecuentes denuncias “no son nuevas”, sino que “llevan años produciéndose”, y “no han mejorado”, pese a que “son conocidas por la empresa, por la dirección del centro escolar y por la propia administración pública andaluza”.
Para ejemplificar lo que ocurre, estas familias han expuesto que “los purés que semanalmente se ponen a los niños son descritos como incomibles, presentan mal aspecto y tienen grumos o tropezones”; las tortillas, en ocasiones, están “aguadas”; se habrían producido, aseveran, casos de “comida insuficientemente cocinada, como albóndigas crudas servidas recientemente”; o existen quejas por comida fría, o, como mínimo, tibia.
Periodista. Magíster en Comunicación Institucional y Política. Pasé por EL PAÍS y Agencia EFE. Codirector de Espacio Andaluz (EA).