Con el lema “Muévete por tu salud” y la defensa de la sanidad pública en la mente, Andalucía estaba llamada a copar las calles de la comunidad por segundo fin de semana consecutivo, tras hacer lo mismo durante el pasado sábado 9 de noviembre con motivo de las manifestaciones convocadas en Málaga, Sevilla y Cádiz frente a los problemas de acceso a la vivienda que sufre la población autonómica.
Si el letargo fue, no hace mucho, un elemento achacable a los andaluces y andaluzas, que, pese a ver cómo pilares del Estado del bienestar levantados y cimentados durante décadas comenzaban a serle demolidos ante la mirada impasible de estos y estas, comienza a ser habitual que cada vez sea menos reprochable cierta pasividad, y sea destacable, por el contrario, su cada vez mayor ímpetu de lucha por combatir ese armatoste de garante de unos estándares mínimos de calidad de vida y de equidad social que en estos momentos anda socavando el actual Gobierno del PP en la Junta de Andalucía a pasos agigantados.
En la jornada de este domingo 17 de noviembre, y esta vez en las ocho capitales autonómicas, sin excepción -en Cádiz, ahora bien, tuvo lugar ayer-, más de 25.000 andaluzas y andaluces -según promedio entre cifras de Delegación y subdelegaciones del Gobierno en Andalucía, por un lado, y organizaciones convocantes, por otro- han salido a las calles para intentar poner pie en pared a la auténtica tortura que atraviesan en materia sanitaria, donde las listas de espera rondan los dos millones de pacientes -si atendemos a las cifras de espera para pruebas de diagnóstico, que oculta desde hace cinco años la Junta, cuando llegase precisamente el PP andaluz para presidirla, y que son aproximadamente de un millón-, donde prácticamente se erige como el más de los afortunados aquel que consigue cita con un facultativo médico, donde lograr ser intervenido quirúrgicamente es toda una proeza y donde los profesionales sanitarios siguen alzando la voz mientras ‘se desangran’ por la escasez de recursos, la sobrecarga de trabajo y los paupérrimos salarios que perciben.
Con alegatos como “sanidad pública y de calidad”, “la sanidad pública no se vende, se defiende”, pancartas cuyo mensajes rezaban “la codicia y la mentira se unen contra la sanidad pública” o “ni recortes ni privatizaciones”, y con dos culpables manifiestos, el Gobierno andaluz y su máximo responsable, el dirigente popular Juanma Moreno, contra quien han clamado las y los congregados en protestas como la de Sevilla al grito de “Bonilla, escucha, el pueblo está en la lucha”, cuatro han sido las capitales andaluzas donde la respuesta ha sido más multitudinaria: Sevilla, Málaga, Granada y Córdoba -por orden de afluencia-, donde se han concentrado un total de 15.000 (6.000, según Policía Nacional; 50.000, según organizadores), 4.500 (1.500-10.000), 3.000 (1.600-5.500) y 2.000 (1.500-3.000), respectivamente.
Por su parte, en Cádiz se citaron durante la jornada de ayer 900 gaditanos y gaditanas (600-1.200); en Jaén, alrededor de 800 jiennenses (650-1.000), en Almería, 700 almerienses (500-850) y en Huelva, donde menor participación han registrado las concentraciones secundadas en toda el mapa autonómico, 500 onubenses (400-600).
Periodista. Magíster en Comunicación Institucional y Política. Pasé por EL PAÍS y Agencia EFE. Codirector de Espacio Andaluz (EA).