La Conferencia Episcopal Española ya prepara el relevo del hasta ahora obispo de Cádiz y Ceuta, Rafael Zornoza, tras la denuncia presentada por la víctima del delito de abusos sexuales continuados perpetrado presuntamente en los años noventa por el prelado cuando el damnificado aún era menor de edad (de los 14 a los 18 años, extendiéndose estas prácticas hasta los 21, ya cuando era mayor de edad), y ejercía solo como sacerdote en el municipio madrileño de Getafe.
Tal y como ha podido saber elDiario.es, la sustitución de Zornoza al frente de la Diócesis de Cádiz podría producirse en breve, puesto que la institución integrada por todos los obispos de las diócesis de España y Andorra (que se encuentra bajo autoridad papal) da «verosimilitud» a los hechos denunciados hace cuatro meses ante el Dicasterio de la Fe de la Curia Romana, y por los que ha abierto una investigación ahora el Vaticano.
Según el relato del denunciante, el obispo le llevó a una terapia de conversión para «curar su homosexualidad», algo que, sin embargo, no contravino que este se metiese «todas las noches y las mañanas» en la cama del entonces adolescente, donde le «acariciaba y besaba».
El afectado, que reconoce que en ese momento «la parálisis me controlaba» se quejó en repetidas ocasiones de lo que hacía Zornoza, según confiesa, pero este le aseguraba en todo momento que era «una amistad íntima» y que la «malinterpretaba».

Periodista. Magíster en Comunicación Institucional y Política. Pasé por EL PAÍS y Agencia EFE. Codirector de Espacio Andaluz (EA).




