Cristian López DomínguezNuevo «colapso» en el área de Urgencias del Hospital Clínico de Málaga. El enésimo en lo que va de año. Solo doce días después de que la dirección del centro hospitalario se viese obligada a trasladar pacientes al Hospital del Guadalhorce, la junta del personal denunció durante la jornada de este martes la saturación completa de este servicio, con demoras en el ingreso de pacientes de hasta 36 horas (día y medio) y con la imperiosidad de haber añadido ocho camillas extra ante el desborde existente.
La problemática registrada en el Clínico malagueño, calificada por los seis sindicatos que conforman esta junta de personal (CCOO, CSIF, FTPS, Satse, Sindicato Médico y UGT) de «una lamentable rutina», se ha visto agudizada en este episodio, puesto que entre estos enfermos, aseguran, existen pacientes muy graves, con cuadros terminales, oncológicos (cánceres), derrames cerebrales, infartos cardíacos o infecciones potencialmente mortales.
El presidente de este órgano de representación sindical en el centro, Antonio Martos, ha condenado la «caótica e inhumana» realidad cotidiana que sufren las y los profesionales sanitarios y pacientes en ese área, por la que ha reclamado el cese o dimisión del gerente del Hospital, Jesús Fernández.
El centro sanitario, en una más que posible forma de escurrir la indigna carga asistencial que soportan las y los trabajadores sanitarios y la alarmante respuesta asistencial que padecen los propios malagueños y malagueñas que acuden a Urgencias, ha rechazado, en declaraciones al diario Málaga Hoy, que las horas de espera superen, «en ningún paciente», las 15 y ha asegurado «estar gestionando las altas para agilizar la subida de las distintas unidades de hospitalización de los pacientes que se encuentran en este área con orden de ingreso.
Periodista. Magíster en Comunicación Institucional y Política. Pasé por EL PAÍS y Agencia EFE. Codirector de Espacio Andaluz (EA).
