Nuevo escándalo del Partido Popular (en connivencia con Vox) en el cumplimiento de la ley de Memoria Histórica en Sevilla. El Ayuntamiento de Sevilla, dirigido por el grupo conservador y condicionado en sus políticas por la formación homóloga de extrema derecha, decidió esta pasada semana rechazar los fondos estatales destinados a la exhumación de la fosa común Monumento, la fosa franquista más grande de la capital sevillana y que se encuentra ubicada en el cementerio municipal de San Fernando.
El protocolo, firmado este pasado verano por las cuatro administraciones competentes en el desarrollo de las tareas de exhumación, Gobierno de España, Junta de Andalucía, Diputación de Sevilla y el citado Consistorio sevillano, comprometía a cada una de las instituciones a aportar un 25 % del total del coste con el objetivo de iniciar cuanto antes los trabajos de recuperación e identificación de los cuerpos que yacen en esta fosa, un total de 7.440 personas, de las 2.613 fueron represaliadas por la dictadura franquista. Unas tareas cuya finalización estaba prevista que fuese en el año 2029.
En ejecución de su parte correspondiente, la Secretaría de Estado del Ejecutivo español había notificado al Ayuntamiento hispalense de que le haría llegar próximamente la subvención de 200.000 euros que le correspondía desembolsar para el proyecto, necesitando tan solo la aceptación expresa de dicha ayuda por parte del Gobierno de José Luis Sanz.
Sin embargo, en un nuevo alarde de estaticidad, paralización, incomodidad y oposición a la aplicación de la Ley de Memoria Histórica en Sevilla, el Ejecutivo del PP en el Consistorio sevillano ha desestimado dicha prestación, decidiendo, de facto, torpedear el arranque de los trabajos de exhumación en Monumento.
Periodista. Magíster en Comunicación Institucional y Política. Pasé por EL PAÍS y Agencia EFE. Codirector de Espacio Andaluz (EA).




