Cualquiera diría que la letra que Jesús Bienvenido concibiese para su participación en esta última edición del Concurso Oficial de Agrupaciones Carnavalescas de Cádiz (COAC), en la que obtendría un más que merecido y destacado primer premio en la modalidad de comparsas, iban a ser premonitorias de lo que se le avecinaba por delante a la ciudad de Cádiz en su lucha contra la especulación inmobiliaria, la turistificación y la expulsión de sus vecinos y vecinas.
Sus coplas, ahora bien, no eran proféticas, sino el diagnóstico y la consecuencia de la dura realidad que atraviesa la capital gaditana ante esta problemática, llamada a convertir, cada vez con más fuerza, a una de las capitales de la Costa de la Luz, en un parque temático destinado al lujo de sus visitantes (y no de sus residentes). Tan certeras, que son los versos exactos para poner melodía a la agonía que están viviendo desde hace unas semanas las familias que residen en el bloque de viviendas número 3 de la célebre plaza Fragela gaditana, a quienes, tras más de una década habitando estos domicilios y pagando protocolariamente su alquiler, las nuevas propietarias de la finca, el Grupo Abu y la inmobiliaria Ovando Homes, pretenden desalojar sin remedio para construir en ellos nuevos pisos de lujo.
Y como tal, la agrupación y el célebre letrista gaditano no perdieron la oportunidad de dar su voz de aliento a estos vecinos y vecinas de La Viña, la última de las víctimas de esta vorágine depredadora en la que vive inmersa la capital gaditana y otras tantas localidades andaluzas, en plena concentración de apoyo convocada por el Sindicato de Inquilinato de Cádiz. El destacado músico, compositor y autor carnavalero y su séquito ‘roeador’ se plantaron ante el edificio viñero y frente a una enorme pancarta desplegada en su fachada cuyo lema rezaba «Nos quedamos. Ante la especulación, resistencia vecinal», recitaron alguna de las imponentes letras del tipo que llevasen a concurso.
«Aquí no mando yo, en mi barrio ya no mando yo. Ahora manda cualquiera. Somos los que habitábamos los barrios, los nacidos del barro, la soberana vecindad […] Somos los que sobran, dentro de esta ganga. Somos los que están fuera de la ley de la oferta y la demanda. Somos la rata, tata, tata, tata». Un momento tan mágico como reivindicativo, en lo que ya es una nueva oficialidad: que Cádiz está «en lucha» contra el lobby inmobiliario, especulador y rentista, y esta batalla vecinal prevé ser la primera de muchas.
Vídeo: @pradotti, en Instagram
Periodista. Magíster en Comunicación Institucional y Política. Pasé por EL PAÍS y Agencia EFE. Codirector de Espacio Andaluz (EA).




