bañistas de castell de ferro increpan a un policía de paisano que retenía a un joven migrante (granada).

Los gritos de otros bañistas de Castell de Ferro (Granada) increpando a un «policía de paisano» que retenía entre sus rodillas a uno de los migrantes desembarcados: «¡Que lo dejen, dejad en paz al chiquillo!»

05 Ago, 2025 · 16:33h

La playa del Sotillo, de Castell de Ferro (Granada), no fue solo testigo de las prácticas xenófobas de algunos bañistas que intentaron salir a la carrera y retener a más de una decena de migrantes que habían desembarcado en patera justo en ese momento en la orilla, con el objetivo de que fuesen puesto a disposición de agentes de la Guardia Civil allí emplazados. También hubo una importante luz de moralidad y esperanza entre tanto espectador del suceso.

Mientras un «policía de paisano» (como aseveraban varios testigos que este mismo había asegurado ser) retenía entre sus rodillas a uno de los migrantes, la gran mayoría de ellos jóvenes (que habían llegado «agotados» y «asustados» del viaje por el Mediterráneo en semejante embarcación), muchas otras y otros bañistas (especialmente, mujeres), comenzaron a reclamarle repetidas veces a este presunto agente que «dejasen en paz al chiquillo».

Algunas y algunos de estos testigos de lo sucedido, que seguían sin creerse la acción desproporcionada de esta «policía de paisano», del resto de agentes de la Guardia Civil y de otros bañistas, no tenían reparos en calificar las maniobras de estos con expresiones como «qué poca vergüenza». «Lo ha tirado al suelo al chiquillo, vamos…», lamentaba, de hecho, una señora, al ver cómo reducía sin escrúpulos a una de estas personas migrante el mencionado individuo.

Vídeo: IDEAL Granada

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