El regreso a la normalidad en la vida de los andaluces y andaluzas tras las vacaciones navideñas ha traído consigo nuevamente, pese a la distracción que pudo suponer temporalmente las fiestas de fin de curso e inicio de otro nuevo, una realidad con visos de ser irreparable: el caos y el colapso que sufre actualmente el sistema sanitario en Andalucía. Tanto, que un solo un día después de que los hogares de la comunidad amaneciesen cargados de regalos, algunos hospitales públicos andaluces ya dejaron estampas de absoluto esperpento por desborde en la respuesta asistencial.
Uno de los que más acusó este desorden, al que viene abocando la pésima gestión sanitaria del Gobierno del PP en la Junta (sin eufemismos) fue el Hospital Virgen Macarena de Sevilla, que en la noche del martes al miércoles vio cómo los y las pacientes se veían obligados a esperar hasta siete horas en la sala para ser atendidos. Un área, el de Urgencias, además, donde precisamente ese mismo atasco en la atención al paciente originaba que sus estancias estuviesen llenas y que muchos enfermos y enfermas se quedasen sin asiento, aguardando de pie, consecuentemente, durante largos lapsos de tiempo hasta ser llamados.
Si bien el triaje apenas era efectuado tan solo minutos después de la llegada de los pacientes, muchos de estos y estas entraron en el centro hospitalario bajo la luz del sol y salieron del recinto entre la oscuridad de la madrugada. «Entramos en las Urgencias a las 20:30 y no le pasaron a una primera consulta hasta las 03:15 h», reconocía el familiar de una de las pacientes afectadas a Diario de Sevilla (medio que ha desvelado lo sucedido), subrayando incluso que el tiempo de espera fue menor «porque no paré de protestar». De hecho, la agonía de la paciente y de sus familiares no terminó hasta bien entrado el día siguiente, tras tener que aguardar y exponerse a varias pruebas posteriores a esa primera de las consultas.
Partido Comunista Obrero Español (@PCOE_Estatal, en ‘X’)
Ante semejante escenario, fueron numerosas las hojas de reclamaciones presentadas, animadas, incluso, por las y los propios profesionales sanitarios con el objetivo de que la desastrosa situación quedase reflejada en incidencias para evitar que se repita en un futuro.
Periodista. Magíster en Comunicación Institucional y Política. Pasé por EL PAÍS y Agencia EFE. Codirector de Espacio Andaluz (EA).