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Nuevo lío de la Policía Local sevillana con la mantería: una joven denunció en diciembre haber sido multada por «opinar» en la terraza de un bar que no se debía criminalizar a los manteros

La Policía Local sevillana sigue granjeándose nuevas controversias en torno a la «persecución» y «criminalización» (como la han catalogado abiertamente asociaciones en favor de los derechos humanos) de los manteros y vendedores ambulantes en la ciudad. Si todavía hay centenares de voces que continúan exigiendo una investigación y el esclarecimiento de los hechos en torno a la muerte del mantero Mamouth Bakhoum (así como justicia), que falleciese ahogado la todavía reciente jornada del 30 de diciembre tras precipitarse al río Guadalquivir mientras era perseguido por la Policía por simplemente vender productos en su manta, una nueva polémica se cierne sobre la institución policial sevillana.

Días antes del trágico suceso que acabó con la vida de Bakhoum, el 15 de diciembre, una joven ya denunció a través de su perfil de Tik Tok (@ro.smile.happy, en Tik Tok) haber sido multada con una pena económica de entre 100 y 600 euros por «haber faltado el respeto y consideración a los agentes de los cuerpos y fuerzas de seguridad del Estado». Lo hizo incomprensiblemente tras solo advertir a unos amigos con los que compartía mesa en la terraza de un bar que le «daba vergüenza que con las barbaridades que se producen en Sevilla», la Policía Local sevillana se dedicase a perseguir y criminalizar a unos «pobrecitos» manteros (que portaban «bolsos», «carteritas»…), a los que andaban buscando en las inmediaciones de la Iglesia de Santa Ana, en pleno barrio de Triana.

Una opinión que profirió, como ella misma subraya en el vídeo-denuncia, «en su propia mesa, con las personas con las que compartía comida», pero que en ningún momento le fue reprendida a los agentes, que  jamás «impidió el trabajo» de estos y que no buscó «ofenderlos ni insultarlos»,  solo señalar al resto de comensales que debían de invertir «equipo, energía y sus labores» en otras tantas cuestiones en vez de hacerlo sobre esos «pobrecitos» que «solo se buscan la vida vendiendo cuatro porquerías, nada, eso sí, en contra de la salud pública».

Vídeo: @ro.smile.happy, en Tik Tok

Cabe recordar que no es la única actuación reciente del gremio policial sevillano en contra de la libertad de expresión y de denuncia en torno al hostigamiento que anda sufriendo el colectivo de manteros en la capital hispalense, puesto que quince días después de la defunción de Mamouth Bakhhum, dos sindicatos policiales andaluces (SPLS y CSIF) presentaron una denuncia ante la Fiscalía contra el líder de Adelante Andalucía, José Ignacio García, por presuntamente «difamarles» en la muerte del mantero senegalés (tras las declaraciones del dirigente andalucista sobre «racismo institucional, violencia policial y represión», teniendo en cuenta que esta persona racializada fue perseguida por los policías «durante más de un kilómetro corriendo» por solo portar 34 camisetas falsificadas) y otro sindicato policial (SPPME) interpuso una querella contra la concejala de Podemos en el Ayuntamiento de Sevilla, Susana Hornillo, por «cargar contra la labor policial», cuando exclusivamente había pedido en el Pleno del Consistorio sevillano una investigación policial interna sobre el suceso.

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