El Servicio Andaluz de Salud (SAS), en una Mesa Sectorial extraordinaria, ha presentado a las organizaciones sindicales el Plan de Fidelización de residentes que concluyen su formación en septiembre. Este plan responde a la notoria carencia de personal sanitario en los centros públicos andaluces. En concreto, el SAS oferta un total de 656 plazas MIR de último curso, a los que les abonará 500 euros extras al mes.
Salud ha explicado que este Plan responde a una situación excepcional, originada por la pandemia del Covid-19. De esta manera, propone a los residentes que finalizan su formación en septiembre poder empezar a desarrollar su trabajo en distintos Centros de Salud a los de su lugar de formación. Para ello, propone un Plan de «rotaciones externas», para que los residentes puedan volver a este centro de formación una vez acabe el periplo veraniego.
Esta medida que propone la consejería en la Mesa Sectorial no ha tenido una gran acogida por parte de los sindicatos. Concretamente, UGT y CCOO han rechazado esta medida, mientras que el Sindicato Médico Andaluz (SMA), ha aceptado este incentivo de 500 euros, pero ha exigido «medidas adicionales frente a la crisis de la medicina pública».
Para UGT, la Consejería de Salud está demostrando con esta propuesta su «incapacidad de gestión para buscar soluciones», priorizando la «imposición y no la negociación». «La situación es tan lamentable y esperpéntica como tratar a estos profesionales como especialistas para asistir a la ciudadanía y como auténticos ‘becarios baratos’ a la hora de pagarles esa asistencia».
El sindicato ha advertido de que esto provocará un «efecto cascada» en todos los residentes de los años posteriores, que también verán sus condiciones modificadas, debido que estos deberán cubrir los huecos que dejan en sus lugares de residencia. Además, UGT ha criticado la actitud de la Consejería al convocar una Mesa Sectorial «sin posibilidad de negociación, cuando ya han vendido anteriormente a la prensa» la medida que se presenta.
El SMA, por su parte, ha reconocido que esta medida «no solucionará los graves problemas que sufrirá la medicina pública andaluza este verano», aunque «es posible que contribuya en alguna medida a mitigarlos». De este modo, el sindicato médico ha aceptado la propuesta por «responsabilidad».
Asimismo, han solicitado el SAS el inicio de negociaciones tras el periodo estival con la intención de «resolver los problemas que aquejan al colectivo de los facultativos andaluces», sobre todo, las «carencias» de la Atención Hospitalaria y la situación de los médicos de Atención Primaria.
Por último, CCOO ha expresado que «no acepta el chantaje» al que el SAS está «sometiendo al personal residentes y a las unidades docentes, para utilizarlos como mano de obra barata». El sindicato considera que la medida propuesta por la Consejería «vulnera la normativa que regula la formación de los residentes, atenta contra la misma, desnaturaliza la función de las rotaciones externas y supone un fraude de ley».
CCOO ha advertido que exigirá el cumplimiento de la normativa vigente, el «respeto a la formación del personal residente y se reserva las medidas legales oportunas para todos aquellos responsables de la Administración que incumplen la normativa».
Periodista todoterreno especializado en comunicación política. Tratando de interpretar la actualidad con la mirada puesta en el sur.
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Codirector de Espacio Andaluz.
