Coger cita con el médico de familia en Andalucía comienza a ser toda una aventura que demanda, como mínimo, fuerza de voluntad y paciencia, mucha paciencia. El alarmante deterioro que viene sufriendo durante los últimos años la sanidad pública andaluza ha dado pie a la irrupción de una práctica inédita jamás vista por los lares del sur de la Península: la conformación de colas durante las madrugadas en múltiples centros médicos de la comunidad para poder ser atendidos por un facultativo.
Cada vez son más los municipios andaluces cuyos ciudadanos y ciudadanas se ven forzados a esta, a priori, rocambolesca, pero, a la postre, irremediable y completamente necesaria praxis en pos de ver a su médico. Málaga, Córdoba, Huelva, Almería y Sevilla son ya las cinco provincias que consignan alguno de los puntos rojos de cobertura médica: Antequera, el sur de la provincia de Córdoba, la de Huelva casi al completo, El Ejido y la Sierra Sur sevillana, son algunas de las localidades, zonas y comarcas de extrema dificultad de accesibilidad para la atención sanitaria.
La ausencia de suficientes médicos de familia para atender a poblaciones de miles y/o de decenas de miles de habitantes, que puede llegar al 50 % de la plantilla médica; la no subsanación de las bajas de estos o de las y los profesionales sanitarios; la indisponibilidad de determinados especialistas, como los pediatras; o, el cierre de áreas, son algunas de las principales problemáticas que están acusando estos municipios, empujados al colapso -sobre todo, de los servicios de urgencias- y al abandono.
El desborde y, consecuentemente, la caída de la aplicación móvil, Salud Responde, a la que ya se cuentan por miles los andaluces y andaluzas que acuñan como «Salud No Responde», y el de los teléfonos de atención de los consultorios tampoco ayudan. La conclusión es, por tanto, siempre la misma: es imposible coger una cita si no es así.
En pueblos sevillanos como Estepa o, especialmente, Gilena y Pedrera, la llegada de usuarios apenas supera las 06.00 h de la mañana. A las 06:15 h, para ser exactos, ya comienzan a llegar los primeros pacientes a la puerta del centro de salud de esta localidad sevillana. Se dan los buenos días los primeros intrépidos -por imperiosa necesidad- y tan solo media hora más tarde, ya son decenas e, incluso, más de una treintena, las y los que aguardan para coger cita. En El Ejido (Almería), muchas veces la cantidad de personas que se agolpan en fila en la entrada del consultorio llega al medio centenar. Es absolutamente inviable obtener cita de manera telemática o telefónica.
Muchos de las y los que acuden lo hacen por partida doble o triple durante la semana, aunque apenas requieran de una simple analítica. Bajo promesas de que abrirán la agenda esperan horas y horas hasta que un mensaje final de ‘lo siento, la agenda está cerrada’ dinamita por completo sus esperanzas. Una incidencia que, más allá de ser puntual y exclusiva para una única jornada, se repite día tras día en las ya denominadas como las ‘colas de la sanidad’ hasta que, tras varias jornadas asistiendo, consiguen la ansiada cita.
Vídeo: @mari.baena.blanco, en Tik Tok
Periodista. Magíster en Comunicación Institucional y Política. Pasé por EL PAÍS y Agencia EFE. Codirector de Espacio Andaluz (EA).