Día de la Memoria
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«Nunca más en ningún lugar contra nadie»: el manifiesto de la asociación Triángulo Azul en el Día de la Memoria de las Víctimas del Holocausto

En el Día Internacional de la Memoria de las Víctimas del Holocausto, la asociación Triángulo Azul Stolpersteine ha resaltado su lucha y compromiso contra el racismo y toda forma de intolerancia que pueda «conducir a actos violentos contra determinados grupos humanos por razón de su etnia, color de piel, orientación sexual, creencias religiosas o políticas, incluidas las de aquellas personas que lucharon por la defensa de los derechos humanos y los valores democráticos».

La asociación Triángulo Azul, que en Andalucía tiene mayor implantación en las provincias de Córdoba y Jaén, es una organización sin ánimo de lucro que tiene como fin prioritario y central la recuperación, divulgación, homenaje y todo lo relacionado con la memoria histórica del exilio y deportación de cordobeses y jienenses a campos de concentración nazis, siendo uno de sus objetivos fundamentales la elaboración y difusión de proyectos pedagógicos que tengan por objetivo la educación y difusión de contenidos didácticos orientados al alumnado de Enseñanza Secundaria Obligatoria y Bachillerato.

En este sentido, Triángulo Azul Stolpersteine se dedica a rendir homenaje a estos andaluces deportados colocando una piedra en homenaje al casi medio millar de cordobeses y jienenses que formaban parte de los miles de españoles deportados. Concretamente, la Asociación calcula que al menos 353 habían nacido en Córdoba y 221 en la provincia de Jaén. La mayoría fueron trasladados al campo de trabajo y exterminio de Mauthausen, pero también hay registros en Buchenwald, Dachau, Flossenbürg, Struthof-Natzweiler, Neuengamme, Sachsenhausen, Gross-Rosen, Mittelbau-Dora y Ravensbrück.

Durante los 40 años de miedo y represión de la dictadura española estas víctimas cayeron en el olvido, sumado a «la falta de compromiso político durante gran parte de nuestra democracia para afrontar la reparación de estas víctimas». La ruptura de ese silencio es el objetivo fundamental de la Asociación, aseguran, para que el «relato de los deportados siga vivo y no se borre; para que la Memoria del horror del franquismo y el nazismo nos sirva para conocer hasta dónde puede llegar la capacidad humana para hacer el mal, pero también para ejercer el bien y la solidaridad, y convertirse en una potente herramienta contra la intolerancia; y para que el anhelo de los republicanos que pasaron por el horror nazi se cumpla: “¡Nunca más en ningún lugar contra nadie!”.

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