Al igual que ocurrió durante la Covid-19, o durante los últimos procesos electorales, o ante cualquier evento mínimamente significante ante el que la derecha y extrema derecha puedan ‘sacar tajada’, las redes sociales sirven como altavoces gigantes para expandir mentiras, odio y desinformación con unos intereses claros, pero que perjudican enormemente la realidad que rodean, sacuden el miedo y la preocupación y provocan un desgaste, paulatino y cada vez mayor, democrático en la ciudadanía.
El último episodio, cómo no, ha sido la tragedia ocasionada por la DANA en la Comunitat Valenciana, donde hay más de dos centenares de fallecidos, pueblos completamente arrasados, pérdidas incalculables, personas desaparecidas y una tragedia oficiosa pero aún no oficial, que poco a poco iremos conociendo a medida que se pueda ir conociendo y llegando a áreas aún inaccesibles. Como no podía ser de otra manera, entre la ineficacia política -manifiesta- que ha ayudado a que la tragedia alcance estos niveles, y las devastadoras consecuencias de la climatología, el malestar es evidente.
Este domingo se había preparado una visita oficial donde los reyes, Felipe y Leticia, el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y el presidente de la Generalitat, Carlos Mazón, han visitado alguna de las zonas afectadas. Este cortejo ya había empezado con mal pie, puesto que el órgano ejecutivo de la comunidad había prohibido el tránsito de voluntarios justo coincidiendo con la visita oficial, aunque alegando otros motivos. Algo que no sentó nada bien. Y, como no podía ser de otra manera -de nuevo-, los incidentes y los altercados producidos han sido inéditos y han provocado múltiples conclusiones y conversaciones.
Más allá de esto, es significativo que ante la avalancha de recriminaciones, peticiones, gritos, insultos y lanzamientos, en mitad del caos, el rey, Felipe VI, se acercó a hablar con algunos de los ciudadanos afectados, donde advirtió a estos del peligro de consultar la información en cualquier lugar de internet, puesto que hay gente que se aprovecha de la situación y lo que busca es el caos: “No hagáis caso a todo lo que se publica, porque hay mucha intoxicación informativa y mucha gente interesada en esto, para que haya caos”.
Internet es un portal de entrada enorme de ideas conservadoras y de extrema derecha para la ciudadanía, especialmente los más jóvenes, que cada vez acuden más a canales extra oficiales a ‘informarse’, donde acaban recibiendo dosis manipuladas de la realidad y manipulando la visión de la misma. Una de las redes donde este fenómeno es ‘trending topic’ – permítanme el juego de palabras- es X (antes Twitter). Desde que el controvertido magnate económico Elon Musk se hizo con la plataforma, de la que se sirvió Donald Trump en 2016 para llegar a la Casa Blanca, es conocido que sus medidas están provocando un auge, cada vez mayor, de este tipo de contenidos, favorecidos por el famoso algoritmo.
Aunque no solo es esta red social, es un fenómeno extendido por todas las redes sociales y que traspasa generaciones, aunque sí es cierto que es más acuciante en los hombres jóvenes. Precisamente, las redes sociales son el terreno de juego que el agitador Alvise Pérez utilizó para llegar a ser eurodiputado en las pasadas elecciones europeas con el partido creado por él mismo. Un eurodiputado que también ha viajado a Valencia.
Y solo hace falta ‘darse una vuelta’ por las redes sociales para advertir quiénes estaban allí y qué tipo de movimientos y acciones estaban alentando. El primero de los archiconocidos actores presentes en mitad de la tragedia es Javier Negre. Opulento dueño de Estado de Alarma, el pseudomedio de comunicación para el que trabaja otro activista ultraderechista, Vito Quiles. Horas antes de los altercados el periodista ponía el siguiente post en X (antes Twtitter) : “No quieren contar la hora en la que Sánchez visita junto a los reyes los municipios afectados. Uno de ellos será Mula salvo cambio de planes. Ayer estuvieron los responsables de la Casa Real y Moncloa supervisando todo. Si os pilla cerca ya sabéis. PD: el Rey no tiene culpa”.
Otro de los que se ha pasado por estos lugares es Alvise Pérez, el líder de Se Acabó la Fiesta y eurodiputado, conocido por expandir bulos en su canal de Telegram. También ha estado Daniel Esteve, líder de Desokupa, al igual que se ha visto colectivos ultraderechistas, como la organización ‘Revuelta’.
El líder de Desokupa incluso ha llegado a grabarse un vídeo alentando a los ciudadanos a salir por la noche para realizar una “limpieza de anchoas” que, en el lenguaje de la extrema derecha, serían “emigrantes y votantes de izquierda”.
Periodista todoterreno especializado en comunicación política. Tratando de interpretar la actualidad con la mirada puesta en el sur.
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Codirector de Espacio Andaluz.