A principios de 2019. Esa fue la última vez que los andaluces y andaluzas pudieron acceder a las listas de espera para pruebas diagnósticas que consigna Andalucía. Desde entonces, la opacidad es absoluta. Nadie en la comunidad, excepto el propio SAS, conoce, a ciencia cierta, cuántas personas podrían constituir el grupo de pacientes que aguardan para que les sea realizada un examen de este tipo. Voces expertas de grupos de la oposición, como el PSOE de Andalucía -que venía, precisamente, de abandonar la Junta entonces-, ahora bien, estiman que este grueso «ronda el millón de personas», más aún que las que esperan para ser atendidos por un especialista y casi cinco veces más de las que lo hacen para ser operados en quirófano.
Fueron precisamente Moreno y el PP de Andalucía los que, nada más poner pie en la dirección de la Administración por primera vez en los, en ese momento, 40 años de vida democrática en Andalucía decidieron dar por finiquitada la transparencia que detentaba este estadístico en la Junta y convertir todo lo que era campo abierto en opacidad. Todo ello, pese a que no son pocas las ocasiones en las que el Ejecutivo andaluz busca embadurnarse de presunta transparencia ante los ojos de la sociedad andaluza.
Tanto es ese secretismo, de hecho, que, a día de hoy es literalmente imposible acceder en la web del propio Servicio Andaluz de Salud no solo a las cantidad de andaluces que componen este censo o lo han hecho en el último lustro, sino también a los que lo hacían en la ya otrora última actualización realizada a principios de 2019 sobre los datos recogidos en este sentido en el segundo semestre de 2018. Tampoco, de la misma forma, a todo lo sucedido con anterioridad a 2019.
Las ‘listas de espera para pruebas diagnósticas’, en busca y captura en el catálogo de estadísticos del SAS y de la Consejería de Salud. Fuente: La propia web del Servicio Andaluz de Salud.
Parece claro que este afán por esconder un montante enorme de ciudadanos de la comunidad que quieren efectuarse una prueba diagnóstica y no pueden hacerlo no responde a otro motivo que al de escurrir un bulto cuyo tamaño podría ser tan desmesurado como para alcanzar, precisamente, el 50 % de todo la millonaria suma de aquellos y aquellas que se encuentran en listas de espera para cualquier necesidad médica en el territorio.
En cuanto a las listas de espera del resto de requerimientos médicos, este mismo jueves Marea Blanca ha decidido denunciar ante las ocho Fiscalías provinciales de la comunidad el caos sanitario y la prolongación sin precedentes de estas nóminas de andaluces y andaluzas que aguardan para ser atendidos por un especialista, para que les sea realizada exploración por radiodiagnóstico o para ser intervenidos quirúrgicamente, lo que, advierten, “pone en peligro sus vidas”.
Periodista. Magíster en Comunicación Institucional y Política. Pasé por EL PAÍS y Agencia EFE. Codirector de Espacio Andaluz (EA).