El Partido Popular y Juanma Moreno continúan dando pasos de gigante en pos de construir el sistema de predominante participación privada y desmantelamiento y deterioro de lo público que pretende importar hasta límites insospechados en Andalucía (por mucho que intente embadurnar su discurso político hablando de «colaboración público-privada»), en un claro guiño al que también poseen otras comunidades en las que también gobiernan, como en la Madrid de Ayuso. Y el sistema educativo en la comunidad andaluza no iba a ser menos víctima de ello.
En pleno período de matriculación para el próximo curso escolar 2025-26, la Consejería de Educación ha cifrado sus intenciones en torno a la continuidad de la docencia en las aulas públicas y en las concertado-privadas para este año lectivo venidero. Un afán que volverá a pasar otro curso más (y ya van seis) por el cierre de centenares de clases públicas en el sistema educativo autonómico para total mantenimiento, por el contrario y sin excepción, de todas las aulas de titularidad concertada (privadas a la postre).
Los datos son devastadores. Tanto, que dan miedo. Andalucía alcanzará desde el próximo mes de septiembre, y solo en algo más del último lustro, la friolera de 3.000 clases públicas que han sido selladas por el ente público desde que tomó sus riendas, en 2019, Moreno. Y es que la Consejería de Desarrollo Educativo, liderada por Carmen Castillo (ya con numerosas polémicas en su haber pese a que solo lleva meses como máxima responsable de la cartera educativa), ha decidido clausurar la nada desdeñable cantidad de 525 clases de titularidad pública, siendo Sevilla la provincia la más damnificada con un total de 163 aulas precintadas.
Una resolución, justificada bajo la presunta «no demanda de escolarización» y la «crisis de natalidad», que, ‘sorprendentemente’ (para sorpresa de nadie) no afectará de ninguna forma a la enseñanza concertada, que, como si de una divinidad inmaculada e impoluta se tratase, mantendrá todos sus conciertos educativos, sin una sola excepción, para el futuro curso escolar, a la que dice no pasarle factura ninguna de las dos premisas anteriormente mencionadas.

Periodista. Magíster en Comunicación Institucional y Política. Pasé por EL PAÍS y Agencia EFE. Codirector de Espacio Andaluz (EA).