La Junta de Andalucía no cobrará entrada alguna por visitar los 34 museos o conjuntos arqueológicos de gestión autonómica, como mínimo, hasta después de verano. Pese a haber acelerado la norma durante los meses inmediatamente previos a la época estival, anunciando que comenzaría a cobrar un «precio simbólico» -como la calificaban- de entre 2 y 6 euros en ocho de estos espacios culturales, la administración pública andaluza retrasará pues finalmente la implementación de la nueva ley.
La decisión fue anunciada precisamente durante la sesión plenaria de este miércoles 10 de julio, motivada en gran medida por la previsible negativa del PP andaluz, que detenta la mayoría absoluta en la sede de autogobierno del territorio, a la tramitación de una tasa turística en Andalucía que retribuya, al menos, beneficios a las arcas públicas municipales y autonómicas por los efectos nocivos que vienen acarreando para la comunidad el modelo turístico implementado por los populares, la turistificación, el turismo masivo y la proliferación de pisos turísticos en las principales ciudades andaluzas. Una anticipada predicción que se hizo, a última hora de la tarde, realidad con los votos contrarios del propio liderado por Juanma Moreno y de Vox a la gestión parlamentaria de la ley presentada por Adelante Andalucía.
El Ejecutivo andaluz y la Consejería de Turismo, regentada por el también popular Arturo Bernal -quien ayer protagonizó un polémico momento al descalificar a la bancada socialista durante la celebración del Pleno-, ha justificado este inesperado dictamen en la necesidad de «numerosos cambios» en los ochos museos selecciones y de una «larga tramitación y aprobación» de todo ello en el Consejo de Gobierno.
La controvertida medida, que pondrá fin a 23 años de gratuidad para el acceso a los museos y enclaves culturales gestionados por la Junta, desde que, en 2001, esta decidiese que la entrada para andaluces, españoles y europeos fuese gratuita, provocó un importantísimo revuelo en la comunidad al levantar un verdadero vendaval contrario a la iniciativa, especialmente en redes. En ellas, multitud de andaluces y andaluzas mostraron airadamente su rechazo a la nueva propuesta, en especial por la obligación de pago para la población andaluza, como si esta fuera exógena.
Periodista. Magíster en Comunicación Institucional y Política. Pasé por EL PAÍS y Agencia EFE. Codirector de Espacio Andaluz (EA).