Cristian López DomínguezNoviembre de 2023. No hay que irse especialmente atrás en el tiempo para contemplar al presidente andaluz, Juanma Moreno, reclamando, ante la quita de la deuda planteada por el Gobierno de España a Cataluña, una de idéntico montante para la comunidad que gobernaba y gobierna. Una oferta que el jefe de los populares andaluces no esperaba que tuviese no solo réplica positiva, sino que se quedase corta.
Algo más de un año más tarde, el Ejecutivo central, liderado por el socialista Pedro Sánchez (y con la destacada presencia de la nueva lideresa del PSOE-A, María Jesús Montero, en su círculo más estrecho de gobierno), le ha devuelto una contraoferta al alza: nada menos que casi 19.000 millones de euros, un millón más de lo que Moreno exigía abanderándose de una cínica bandera ‘verdiblanquista’ y del presunto afán en beneficio andaluz.
La respuesta del máximo dirigente del PP andaluz para sorpresa de todos (y de nadie) ha sido negativa, abocando a la comunidad andaluza a una pérdida que podría ser desastrosa para sus necesidades e intereses, a tenor del importe económico que supone (ocho veces el presupuesto autonómico de dependencia y dos el de educación, por ejemplo), siendo también casi la mitad de la deuda que consignaba Andalucía con el Estado español (un endeudamiento que defenestraba las posibilidades económicas del territorio).
Tanto es así la descarada hipocresía de Juanma Moreno y del actual Gobierno de la Junta en esta cuestión que el propio PSOE de Andalucía ha querido evidenciarla a través de dos vídeos en los que exhibe este particular ‘desorden’ de la personalidad de este y de estos en un lapso de tiempo no superior al año y medio. Todo ello, además, respondiendo a un único y exclusivo interés partidista: el de obedecer al líder del partido a nivel nacional, el gallego Alberto Núñez Feijóo, a Génova y a Madrid, en sus estrategias para buscar desgatar y derribar el actual Ejecutivo de coalición entre PSOE y Sumar y al máximo dirigente español, el propio Sánchez, teniendo en cuenta que el Grupo Popular gobierna en 11 comunidades autónomas (más Ceuta y Melilla).
De este modo, el «verdiblanquismo» del que pretendía abanderarse Juanma Moreno como presidente de la Junta, haciendo guiños desde 2019 a ciertos elementos simbólicos del andalucismo (conmemoración del 4 de diciembre como ‘Día de la Bandera’, entre otros) se ha difuminado tan rápido como llegó.
Periodista. Magíster en Comunicación Institucional y Política. Pasé por EL PAÍS y Agencia EFE. Codirector de Espacio Andaluz (EA).
