El próximo 8 de abril. Esa es la fecha marcada en blanquiverde en el calendario de sesiones del Congreso de los Diputados. Ese día, la Cámara Baja de las Cortes españolas dilucidará el devenir de la ley de gafas gratuitas propuesta por la agrupación andaluza Adelante Andalucía para que la salud visual deje de depender del bolsillo de cada uno y una.
La iniciativa, pionera a nivel estatal, fue aprobada por unanimidad en el Parlamento andaluz el pasado 16 de octubre y buscará ahora la misma suerte en tierras madrileñas, donde será defendida por los tres diputados que salieron elegidos en la Cámara andaluza, entre los que se encontrará el propio portavoz parlamentario de la formación andalucista, José Ignacio García, quien se ha mostrado más que «contento» de poder tener la oportunidad de «representar al Parlamento de Andalucía» respaldando «una ley con vocación estatal que es de sentido común».
Esta ley andaluza de gafas pretende que todos los productos de salud visual sean gratuitos para todos los niños y que varíe su valor para los adultos en función de la renta, de forma que «ver bien deje de ser un privilegio de clase», y que las gafas y lentillas dejen de responder a una cuestión monetaria por la que mucha gente no pueda graduarse o cambiar las que tiene porque no pueda pagarlas.
Esta propuesta legislativa podría beneficiar hasta al 61 % de la población de la población mayor de 15 años que utiliza gafas (el 54 %, en Andalucía), al 31 % de los menores que tienen problemas visuales no resueltos y al millón aproximado de andaluces y andaluzas que debe usar gafas pero no las utilizar porque es incapaz de costeárselas, pudiendo así esta ley mejorar la calidad de vida de estos grupos de población.

Periodista. Magíster en Comunicación Institucional y Política. Pasé por EL PAÍS y Agencia EFE. Codirector de Espacio Andaluz (EA).